MANSA-- SE -- HAYA-- LA --MAR.

Si, mansa se haya la mar y mi barca navega serena. Respiro su calma su suave brisa de oro y plata. La que me hace soñar la que me hace sentir que estoy viva frente a la llama añeja y encendida del lucero peregrino que corona la orilla de la quimera. Mas teje auroras finas despertando al cosmos que caldea la soledad descalza en las noches frías.   Cuando sin luna el alma va dibujando momentos, risas y lágrimas.  Y entre tanto toca la aldaba en el portal de la pupila que abre la puerta para ver la belleza del mar en calma. Y sueña en un
éxtasis envuelta en la magia.  
Que acelera mi latido y recorre con cariño una caricia placida por mi entraña.



Todas las imágenes son de Googles.

Late el corazón del mar su melancolía...  Y las olas vibran con su manto negro perdiendo las rimas entre el centelleo del atardecer donde agoniza un poema. 

El último rayo de sol, acaricia la orilla, la huella de mis pisadas descalzas, de mi corazón desnudo.  En medio de un vaivén loco, mundo de injusticia que empobrece la palabra. 

Mientras duermen los instantes, navegan las estrellas en mares que palpitan; y florecen los arroyos cuando nace un nuevo día de sol que pinta con pinceles de oro, colores en cada rincón de la vida y del alma.

Y un suave y dulce murmullo... me recuerda, unas noches azules, en la pasada primavera. Quimera que duerme ya escrita en mi mundo en la ribera de mis sueños.
Mas siento que se abre la puerta de mi corazón, al pensar en las noches de estrellas entre sorbo y sorbo de aquel cóctel de un Gin-tonic, entre baile y baile pasaron las noches de aquel 
sueño incierto.

¡Mis estimados amigos/as!!!

¡Mi inspiración va a ras de suelo, quisiera entregaros algo bello, algo nuevo, algo distinto, pero no puedo aunque me esfuerzo!  Así os dejo esta sencilla entrada que muestra la grandeza, la majestuosidad de la naturaleza para que la amemos como a nosotros mismos, pues somos parte de ella.
Así cambio la cara a este espacio, y saco ese 1 de año que ya me cansaba de mirarlo.    

¡Que bella es la naturaleza!   Ella a veces nos asombra.
Pero también nos embelesa con su exuberancia. 
Como comprender su magia su fuerza?  Bravucona.
















Aurora boreal elevada en un atardecer de magia,  
es quietud y posee los colores mágicos y perfectos 
cuando la tarde duerme gozosa en la almohada, 
en las montañas nevadas cobran belleza los sueños.

















Ella es delicada, conserva su frescura intacta.
Y no necesita buscar un salón de belleza. 
Mas, nos obsequia su finura su fragancia.
Que decir de tan bella figura?... que embelesa. 
Todo un brote de ternura nacida para admirarla.

La naturaleza está en todas partes;
y gusta de colores exuberantes. Es bella y coqueta.
Ella es perfecta: no necesita peluquero
siempre se nos presenta elegante y, es barbecha.



Gracias a la vida que tanto me dio: gracias por las flores y por los colores que amo con pasión. Gracias por el aire que respiro.  Gracias por el amor y por el sol que me acaricia.   Gracias por la felicidad y también por el dolor.  Gracias por lo que fue posible y, también por lo que no. 











¡Y por último la bella naturaleza! Tan sabia ella!
Que, también sabe de amor! De ternura y de pasión.   
Bravo por ella, porque nos da una lección.



















Marina Filgueira.
Un puñado de besos para los amantes de las cosas sencillas.