HOY HABLAMOS DE AMOR...

¡Hola, mis estimados amigos/as!

Recibí por correo estas imágenes para que escribiera algo al respecto.    
Algo saldrá ... aunque mi inspiración está en baja forma.  
Y con esto, mi sencilla entrada cambia un tanto de color....
Por lo tanto hablaremos de amor...
Para saborear este instante de placer que es tan natural como la vida misma, habremos de sentirnos primero, bien sanos de alma y cuerpo. 
Luego creo que el amor es una de las maravillas del mundo, este instante de éxtasis entre dos cuerpos que se funden abrazados; es el sentir más hermoso que el ser humano percibe.  Si, el amor es la gran rueda de molino que mueve el mundo de todo ser viviente.

¡Poseemos la suficiente claridad en nuestra mente -corazón!  Para lograr esa unión y alcanzar el éxtasis, la culminación sexual que se merecen gozar dos personas que se aman de verdad. 

Ese amor grande que mueve la infinitud del mundo. 
Sólo con la luna por testigo, se para el tiempo, en un éxtasis sensual y eterno. 

Ese amor que da confianza que da sentido, 
al latido de la vida que no se duerme sino que rueda. 
¡Ella, así feliz! Ahoga un gemido en su garganta y sueña despierta o dormida 
¡Que más da... cuando el amor aparca! ...  en la balsa que navega... 
placida por el lago de la vida sin perjuicio. 

Cuando se bañan cuando se duermen, cuando sus cuerpos se rozan, 
y se envuelven en fervorosos gemidos y profundo suspiros anhelando
más besos más caricias ardiente y sentidas. 
Volaron silenciosas en forma de melodías al fondo del corazón, 
que eterniza el color del arco iris y la dicha.

No busquemos el amor , el solo surgirá  y pasará lo que tenga que pasar para bien o para mal.

Creo que merece la pena pensar que en algún lugar respira -suspira y aguarda un encuentro tu alma gemela, qué quiere amarte y anhela tu presencia sin que tú lo sepas ni el tampoco: quizás el azar es el que se encarga que eso suceda; y te toparás con el@ y en un abrazo eterno te hará vibrar.   



¡Abrazado a mi piel: me bañé en la ola cálida del amor!  
Si, del amor que se embebe se excita se relaja;  
mas se funde en mi cuerpo; así mi orilla le aguarda sin pudor, 
sintiendo la ardiente plenitud, infinita qué arde en la mente,
que sin control bebe el amor, del licor que no aletarga.




Cuando bebes de las mieles
del torrente de mi ser,
detente solo un instante,
y siente así mi placer. 



  
Atrapada en la pasión, ¡despeinada!
por aquel viento infiel y sensual;
que salía de tus labios, sorbiendo 
el licor de mi piel, hambriento 
de mi cuerpo que vibra entre sábanas. 

¡Pero luego que será de ti mi amor? 
¡Mañana!!! Si, se fue?
¿Si esta historia terminó? 
¿Harás como dice el tango?... De Gardel.
¡Caminito! Bordado de trébol
en flor.  
Mas eso fue el ayer.
¡Hoy es otro día! Y de nuevo sale 
el sol


Si no tengo amor, nada soy.
Ese tierno amor de padres a hijos e hijos a padres, hermanos amigos, que nunca nos falte.





Mi corazón canta.
Y despierta la mañana 
radiante como siempre
bella y embriagante.
Abro la puerta salgo a la calle 
dejo que entre el aire, 
que el sol caliente 
que el pájaro cante,
que el barco navege 
por aguas tranquilas
y aceános blancos
que marquen la vida 
que sigue mis pasos.

¡Que el poema refleje algo.
 aunque el hielo queme!
aquel folio blanco
que esquivó la muerte,
tengo alegre el alma
el corazón cantando
y ya estoy contenta 
pues todo bien marcha.
Y la plenitud aparece 
con el calor de tus besos
porque saben lo que hago
y digo lo que pienso 
y pienso en lo que digo
Y a veces me arrepiento.
¡Pero a lo hecho, pecho!

21 del 6- 2014-   MARINA FILGUEIRA.

Un puñado de besos para los amantes de lo sencillo.